La vitamina A -conocida asimismo bajo la denominación de retinol- es una vitamina liposoluble que tiene efectos sobre el crecimiento, el mantenimiento de huesos, dientes y tejidos, así como la síntesis de pigmentos para la vista, además de otras funciones. Considerada antioxidante, su fórmula es C20H30O.
Entre los alimentos más comunes que contienen esta vitamina se hallan la yema de huevo, la leche, la mantequilla, el hígado y algunas frutas y verduras, y su falta entraña principalmente problemas oculares, inmunitarios, de huesos y piel.