¿Qué era el impresionismo?

Concepto, definición de impresionismo

El impresionismo fue un movimiento artístico que tuvo lugar a finales del siglo XIX, especialmente en la pintura, aunque también en otras artes como la música y la escultura.

Surgido como rechazo a la pintura tradicional e influido por los descubrimientos científicos acerca de la naturaleza de la luz, se centraba en los efectos que la luz tenía sobre los objetos, que se lograban a través de pinceladas sueltas y de colores vivos.

 

¿Cuáles son las características de la pintura impresionista?

Los rasgos más importantes de la pintura del Impresionismo

La pintura del impresionismo se distingue sobre todo por:

  • su intento de captar la luz: los objetos se representan según la impresión lumínica reflejada en ellos y sus sombras;
  • predominio de las pinceladas sueltas y rápidas y la yuxtaposición de sus colores;
  • sensación de vibración;
  • ausencia de contornos;
  • sombras a base de color -y no negras-;
  • representación directa o al aire libre de escenas naturales y ambientes urbanos en un determinado instante, lo que las convierte en impresiones donde queda plasmado lo fugaz, lo espontáneo y lo cambiante;
  • efectos de aire, luz y reflejos en el agua;
  • ‘impresión pictórica’ en contraposición a la ‘representación fotográfica’;
  • vanguardismo, independencia y antiacademicismo; entre otras características.

¿Quiénes fueron los pintores más importantes del impresionismo?

Ejemplos de los principales pintores impresionistas

Entre los máximos representantes de la pintura impresionista se hallaban principalmente:

  • los franceses Edouard Manet -precursor de este movimiento-, Claude Monet -uno de sus iniciadores-, Camille Pissarro, Auguste Renoir, Edgar Degas, junto con Paul Cézanne y otros que derivarían hacia el postimpresionismo;
  • el francobritánico Alfred Sisley;
  • así como el español Joaquín Sorolla.

¿Cuáles son las características de la música impresionista?

Los principales elementos que caracterizan al impresionismo en la música

El impresionismo musical se distingue, entre otros rasgos, por:

  • su fundamentación en las impresiones de carácter auditivo;
  • el énfasis en el timbre y la sonoridad de los instrumentos (colorido);
  • su imprecisión en el desarrollo de las melodías, que se tornan difusas y fragmentadas;
  • la utilización de nuevas armonías basadas en otros acordes, como los de las escalas pentatónica y de tonos enteros, así como otros intervalos;
  • el empleo de tonalidades no definidas y ritmos irregulares;
  • la evocación de imágenes a través de las sensaciones y efectos sonoros;
  • la creación de ambientes sonoros;
  • su inspiración en la naturaleza;
  • su concepción de la obra musical por puro placer estético (esteticismo);
  • la puesta de títulos sugerentes y poéticos;
  • así como su rechazo al romanticismo.

¿Quiénes fueron los principales compositores impresionistas?

Claude Debussy, una de las grandes figuras de la música impresionista

Algunos de los grandes autores del impresionismo en la música, especialmente en Francia, fueron sobre todo Claude Debussy, Maurice Ravel y Paul Dukas.

Otros compositores se vieron asimismo influidos en mayor o menor medida por este movimiento musical, y en especial por el estilo de Debussy, como Albert Roussel en Francia, Manuel de Falla y Federico Mompou en España, Frederick Delius en Reino Unido, así como Ottorino Respighi en Italia.

¿Cuáles son las obras musicales más importantes del impresionismo?

El Mar, de Claude Debussy, compositor impresionista

Las obras más representativas de la música impresionista comprenden:  

  • El mar (La mer), Preludio a la siesta de un fauno (Prélude à l’après-midi d’un faune), Claro de luna (Claire de lune), etc., de Claude Debussy;
  • Dafne y Cloé (Daphnis et Chloé), Juegos de agua (Jeux d’eau), de Maurice Ravel;
  • El aprendiz de brujo (L’apprenti sorcier), de Paul Dukas;

además de aquellas influidas por este movimiento artístico, como:

  • Noches en los jardines de España -de Manuel de Falla-,
  • Los pinos de Roma (I pini di Roma) -de Ottorino Respighi-,
  • Baco y Ariadna (Bacchus et Ariane), de Albert Roussel; entre otras.