Las glosas –silenses y emilianenses- constituyen los primeros fragmentos de texto en castellano, encontrados en los monasterios de Santo Domingo de Silos y de San Millán de la Cogolla, que se remontan al siglo X.
Se trata de anotaciones que hacían los monjes en un primigenio castellano o lengua romance junto a los escritos en latín, con el fin de facilitar la comprensión de algunos de sus vocablos.
¿Quiénes fueron los escritores más importantes de la Edad Media?