Las principales causas que dan lugar a los terremotos son sobre todo la actividad tectónica, como la liberación de tensiones generadas por el movimiento de las placas tectónicas o la fricción entre ellas, y la actividad volcánica, como es el caso de una erupción volcánica.
Otros terremotos, generalmente de menor intensidad y de carácter local, pueden deberse también a corrimientos de tierra, desprendimientos de rocas, hundimiento del terreno, entre otras razones.
¿Cuáles son las zonas de mayor actividad sísmica?
¿Qué tipos de terremotos existen?