Entre las enfermedades más destacadas que puede padecer el oído figuran:
- la otitis, o inflamación que suele afectar al oído externo y al medio;
- la otosclerosis, o crecimiento óseo anómalo en el oído medio, que puede provocar pérdida de audición;
- el colesteatoma, o acumulación de tejido cutáneo y otros materiales en el oído medio;
- la perforación del tímpano debida a impactos o infecciones graves;
- los acúfenos, o percepción de zumbidos en el oído interno;
- la enfermedad de Menière, que comprende una serie de alteraciones relacionadas con los canales de líquidos del oído interno y sus niveles;
- vértigos y mareos, que inciden en el equilibrio y responden a distintas causas;
- la presbiacusia o pérdida de audición por la edad;
- así como diferentes problemas de audición y sordera -total o parcial- (hipoacusia), muchas veces asociados a otros trastornos.